Acapulqueños cubrieron déficit de trabajadores en Vallarta: Yerena

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La destrucción ocasionada por el huracán Otis en Acapulco desencadenó un fenómeno inesperado que impactó positivamente a Puerto Vallarta. La migración masiva de acapulqueños a este destino turístico contribuyó a resolver temporalmente el déficit de trabajadores que Vallarta experimentaba desde hace años. Rafael Yerena revela que la situación laboral en 2023 cerró con una alarmante insuficiencia de mano de obra, pero la llegada de trabajadores de Acapulco ha logrado estabilizar la situación en 2024.

“Con el problema que tuvo Acapulco, se vino bastante gente de allá a trabajar aquí a Puerto Vallarta. Entonces, más o menos durante 2024, se ha regularizado un poquito más la mano de obra, pero porque llegaron trabajadores de Acapulco que seguramente estarán temporalmente en espera de que se recupere”, explica Rafael Yerena, secretario general de la CTM regional. Sin embargo, señala que la solución a largo plazo requiere un esfuerzo conjunto de empresas y trabajadores.

El líder sindical destaca que, ante la crisis laboral post-pandemia, muchas empresas han perdido a sus colaboradores, quienes, al finalizar el confinamiento, optaron por emprender y se negaron a regresar. Esta problemática se ha hecho evidente, sobre todo, en el sector hotelero y de restaurantes. Yerena sugiere que las empresas deben crear más prestaciones para incentivar el retorno de estos ex colaboradores, subrayando la importancia de la reciente reforma laboral que involucra a los trabajadores en las revisiones de contratos colectivos.

Acapulqueños ayudan a paliar la escasez de empleados en Vallarta tras la devastación de Otis y la crisis post-COVID-19:

“Las empresas se van a ver obligadas a crear más prestaciones en las revisiones de los contratos colectivos de trabajo para que las clases trabajadoras de cada empresa pueda autorizarlos. Esto puede llamar la atención para que los trabajadores que ya no regresaron puedan regresar nuevamente a las fuentes de trabajo”, destaca Yerena. La reforma también aborda una de las demandas más significativas de los trabajadores: las propinas.

La lucha por las propinas se ha convertido en una prioridad para los trabajadores sindicalizados. Yerena revela que, con excepción de un hotel que ya cobra impuestos a las propinas, la mayoría de las empresas no lo hace. Los trabajadores piden un sistema que beneficie más a quienes dependen de las propinas, siendo este uno de los temas que sigue en discusión en este 2024, junto con la reducción de la semana laboral de 48 a 40 horas, un análisis pendiente por parte de los legisladores.

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